Desde la Dirección de Ambiente comenzamos a diagramar la campaña de fumigaciones que llevaremos a cabo este verano para evitar la proliferación del mosquito transmisor del dengue.
Durante todo el invierno estuvimos fumigando los espejos de agua para el control de larvas.
Si tomamos entre todas las medidas preventivas para eliminar los hábitats en los que estos mosquitos se desarrollan, podremos evitar que esta enfermedad llegue a nuestra ciudad.
¿Qué tenemos que hacer?
– Cambiar el agua de recipientes, bebederos y floreros y limpiar bien sus bordes.
– Tapar o voltear objetos que acumulen agua y desechar los que no se usen.
– Limpiar tanques de agua, piletas, rejillas, canaletas y otros espacios que puedan acumular agua siempre.
– En la medida de lo posible, colocar telas mosquiteras o tul en puertas, ventanas, cunas y coches de bebés.
– Cortar el césped de los domicilios y mantener desmalezados sitios y propiedades.
– Aplicar repelente con frecuencia.
Ante el menor síntoma de fiebre alta, malestar general, dolor articular o muscular con o sin erupción llamar al 107. Es importante no automedicarse.
El mosquito Aedes aegypti vive en hábitats urbanos y se reproduce principalmente en recipientes artificiales. A diferencia de otros mosquitos, éste se alimenta durante el día; razón por la cual, los períodos en que se intensifican las picaduras son el principio de la mañana y el atardecer, antes que oscurezca.
Con el cuidado de todos podemos evitar la propagación del dengue.